Normas para facilitar la convivencia

• Modelo de convivencia hacia una cultura de paz

• Periodo entre cambios de clase

• Fumar en el centro educativo

• Recreos

• Comportamiento del alumnado en las actividades lectivas, complementarias y extraescolares

MODELO DE CONVIVENCIA HACIA UNA CULTURA DE PAZ

¿Qué es para nosotras y nosotros la convivencia?

Se trata de construir una convivencia basada en la paz y en la eliminación de toda forma de violencia, un modelo basado en derechos y deberes recíprocos.

Frente a los enfoques reactivo y punitivo-sancionador apostamos por un enfoque proactivo que actúa de manera preventiva sobre la comunidad educativa en su conjunto, que presta atención tanto a las conductas como a los factores estructurales y culturales que influyen en el clima de convivencia y que es inclusivo. La actitud proactiva implica la adquisición de unas actitudes, habilidades y valores imprescindibles para la vida en sociedad que es necesario desarrollar independientemente de que existan o no problemas de quiebra de la convivencia.

Más concretamente, entendemos que la convivencia está constituida por un conjunto de acciones:

La construcción de una “escuela del cuidado mutuo” donde en el centro no se encuentra el niño y la niña, sino la comunidad en su conjunto, porque si los niños son respetados en sus necesidades, tienen que aprender que las demás personas también tienen que ser cuidadas y respetadas en las suyas.

La creación de redes de relaciones que garanticen los cuidados imprescindibles para el mantenimiento de la vida a la vez que educamos para que todas las personas seamos conscientes de que somos interdependientes y de que nos necesitamos las unas a las otras.

Considerar que los conflictos son inherentes a las relaciones humanas y que si se gestionan de manera adecuada, suponen una oportunidad para aprender, para crecer y para madurar como personas y como colectivo.

Las normas consensuadas de manera colectiva, las consecuencias coherentes y justas, el educar con el ejemplo.

Considerar el diálogo como prevención y la mediación como intervención. Pensar en cómo reparar el daño causado, rechazar las conductas desafiantes pero no a las personas que las ejercen.

Los grupos interactivos, las tertulias dialógicas, el aprendizaje cooperativo, el elegir qué aprender, el hacerlo dando un servicio a la comunidad.

Proporcionar oportunidades de participación para todo el alumnado, no solo permitiendo entrar, sino pertenecer. La defensa del derecho a cada persona a ser diferente y a ser educada en la propia diferencia.

El cuidado de las instalaciones, el mantener los vestíbulos limpios, recoger y limpiar la clase antes de salir, el llenar las paredes de murales colectivos.

Los patios donde se juega más al Twister y menos al fútbol, llenar de música en directo los recreos, tener que inventarse juegos sin balón.

Mirar más a los ojos de tu compañero y menos a tu pantalla del móvil.

Sabernos ecodependientes y que por lo tanto debemos cuidar la naturaleza de la que formamos parte.

Hablar más de nosotras las personas y menos de nosotros, pensar porqué y para qué los chicos violentos resultan más atractivos -o como poder unir el lenguaje de la ética y el lenguaje del deseo.

No permitir que en un aula un alumno, una alumna, le rompa su dibujo a otra, que le llamen por un mote que no le gusta, que le quiten el bolígrafo, tener claro qué significa la “violencia 0 desde los 0 años”. Que denunciar lo injusto sea de valientes y no de chivatos y que se considere cobarde a quien humilla y discrimina.

El aprendizaje de habilidades de comunicación para mejorar nuestra inteligencia emocional: la del alumnado y también la del profesorado.

El empoderamiento del alumnado a través de la creación de equipos de Alumnado Ayudante, de Ecolegas, de mediadores escolares, de asambleas estudiantiles, de parejas de gemelos.

El poder aprender la democracia practicándola en las asambleas de aula. La creación de espacios donde sentirnos escuchados y con capacidad de decisión. Practicar nuevas fórmulas de participación horizontal de toda la comunidad educativa.

Colocar la ternura y el afecto en el centro de todo acto educativo: Sin ternura no hay mirada cómplice. Y sin mirada cómplice, la educación está perdida. Porque la confianza y la ilusión son motores incombustibles. E imprescindibles. Ni tarimas, ni autoridad por ley. Ni hábitos o tics trasnochados de falso respeto. Afecto en la acción. Ternura en el trato. Comprensión. Apoyo, guía y mano tendida^[2].

PERIODO ENTRE CAMBIOS DE CLASE

El alumnado permanecerá en el aula, no pueden estar en el pasillo o ir al baño en los cambios de clase.

En ESO y CFGB, en caso de incumplir la norma se tomarán las siguientes medidas:

• 1ª vez: aviso verbal
• 2ª vez: el alumno se queda sin recreo.. 
• 3ª vez: Se queda a séptima hora en el centro

En BTO y CFGM, durante los cambios de clase no está contemplado el retraso, de manera que si un estudiante llega tarde  (sin  justificación) se le considerará falta de asistencia. Esta falta no se marca en Alexia, sino en el cuaderno del profesor/a.

FUMAR EN EL CENTRO EDUCATIVO

Está totalmente prohibido consumir tabaco o cigarrillos electrónicos en los centros docentes como se establece en la LEY 28/2005, de 26 de diciembre.

Se considera una falta muy grave y, por lo tanto será sancionada como tal, tanto si el consumo es de tabaco como de vapers.

Cuando algún personal de centro (docentes o PAS) tenga evidencia de que se está produciendo o se ha producido consumo en algunas de las estancias del centro por parte de un grupo de alumnos/as, y ninguno de ellos/as reconozca la autoría, será sancionado todo el grupo, ya que el hecho de estar presente cuando se comete una infracción puede suponer acción o complicidad y ambos comportamientos serán sancionados del mismo modo, a no ser que haya una inculpación evidente.

RECREOS

RECREOS INFANTIL:

• Se usan los dos patios del edificio , el patio norte para el alumnado de 1ºEI y el patio sur para 2ºEI y 3ºEI.
• Las salidas y entradas se realizarán por los lugares indicados por el profesorado.
• El alumnado no podrá permanecer en las aulas, estando las aulas cerradas, tanto los accesos al patio como al pasillo, con la excepción del aula habilitada para el baño.
• Para los días de lluvia el alumnado permanecerá en el aula con profesorado del nivel juntando dos grupos.
• Hay un baño habilitado en cada patio donde se encuentra un adulto de referencia para gestionar tanto el uso del aseo como la atención sanitaria de heridas u otras incidencias.

RECREOS PRIMARIA:

• Las salidas y entradas se realizarán por los lugares indicados.
• El alumnado no podrá permanecer en las aulas sin supervisión de un adulto. Tampoco puede entrar al pabellón ni permanecer en el pasillo de los baños o en el vestíbulo sin permiso.
• Para los días de lluvia el alumnado permanecerá en el aula con profesorado referente, pudiendo mezclarse con compañeros y compañeras de otros grupos siempre que el profesorado lo vea oportuno.
• El patio de Primaria se divide en tres zonas:
  • Patio 1: zona de areneros y tipis. Este espacio es de uso exclusivo para el alumnado de 1º ciclo. El alumnado mayor podrá hacer una visita breve a sus hermanos/as siempre avisando de ello a las personas responsables de la zona.
  • Patio 2: zona rocódromo y callejones.
  • Patio 3: canchas deportivas. El uso de este espacio se reparte entre el alumnado de 2º y 3º ciclo por días. Existen unas normas de uso de las canchas deportivas:
    • Solo se puede jugar a la pelota en las canchas. No se pueden traer pelotas de reglamento.
    • No se puede comer ni beber dentro de las canchas.
    • El viernes es el “día sin balón”
  • Acceso al urinario durante el tiempo de recreo: se puede ir al baño con el permiso de la persona que supervisa la puerta de entrada al vestíbulo. Al alumnado de 1º y 2º se le recordará el uso del baño tanto antes como después del recreo.
  • Una vez al trimestre se organizará el día de la rueda para el alumnado de 4º, 5º y 6º.

 RECREOS PRIMER CICLO ESO:

• Las salidas y entradas se realizarán por los lugares indicados.
• El alumnado no podrá permanecer en las aulas, solamente si la meteorología es adversa.
• Para los días de lluvia el alumnado podrá permanecer en el aula o hall correspondiente. El profesorado supervisará dichos espacios.
• Habrá zonas organizadas de 1º y 2ºESO que rotarán por días / semanas.
• Solo se puede jugar a la pelota en las canchas.
• No se puede comer ni beber dentro de las canchas.
• No pueden entrar al pabellón ni permanecer en el pasillo de los baños, en la puerta de entrada doble, ni cerca de la puerta de salida.
• Habrá dos zonas de baños disponibles: pasillo de FP y pabellón (supervisado por el profesor que vigila esa zona)
• Se podrá ir al baño máximo 2 personas con el permiso del profesor/a que cuida la zona de patio.

Recreos el resto de las etapas de secundaria:

• El alumnado puede salir del centro durante el horario de recreo con la autorización familias (ver en documentos de inicio de curso Anexo X)
• En caso de permanecer dentro del recinto escolar, no está permitido el uso del teléfono móvil.
• Únicamente se pueden utilizar los baños habilitados (FP y pabellón) con permiso del profesor.

COMPORTAMIENTO DEL ALUMNADO EN LAS ACTIVIDADES LECTIVAS, COMPLEMENTARIAS Y EXTRAESCOLARES

Tal y como se establece en el Decreto 32/2019, por el que se establece el marco regulador de la convivencia en los centros docentes de la Comunidad de Madrid, en su artículo 5:

 “ El alumnado tiene el deber de estudiar y esforzarse para conseguir el máximo desarrollo de sus capacidades. Este deber básico se concreta, entre otras, en las siguientes obligaciones:

1.   Asistir a clase con regularidad y puntualidad, según el horario establecido.
2.  Colaborar en la consecución de un adecuado clima de estudio en el centro, respetar al profesorado y el derecho de sus compañeros a la educación.
3. Conservar y hacer un buen uso de las instalaciones del centro y del material didáctico.
4. Seguir las directrices del profesorado respecto a su educación y aprendizaje, cumpliendo las tareas formativas que se le encomienden.
5. Participar en las actividades formativas y, especialmente, en las escolares y complementarias.

Cualquier comportamiento contrario a estos deberes podrá ser tipificado con falta leve, grave o muy grave dependiendo de la repercusión para el desarrollo de las actividades lectivas, complementarias o extraescolares y sobre los miembros de la comunidad educativa.