Primeras experiencias y aprendizajes del curso
La ilusión y las ganas de toda la comunidad dan vida al colegio. Nuevos espacios y protocolos son parte de la rutina de este curso en el que lo prioritario es la educación integral de nuestro alumnado.
El curso 2020/21 ha comenzado con ganas, ilusión e incertidumbre. El 18 de septiembre se completó la vuelta a las clases en todas las etapas y niveles en Hipatia. En los primeros días de curso, reflexionamos sobre todo lo que aprendimos durante los últimos meses del curso pasado, confiando en que ese bagaje nos guiará en los próximos meses, tal y como quedó de manifiesto en la Jornada Inaugural del curso en FUHEM
Nos gustaría transmitir un mensaje de ánimo y confianza a toda nuestra comunidad escolar, en la misma línea que lo ha hecho el director del Área Educativa de FUHEM, en un artículo, publicado en El Diario de la Educación, titulado: Razones para la confianza en este curso escolar “Hay razones para la esperanza y para no perder la confianza en que, a pesar de las dificultades, vamos a seguir haciendo todo lo posible por seguir dando a las comunidades educativas las respuestas que necesitan y merecen, por complicado que resulte”, explica Víctor M. Rodríguez.
Hipatia ha iniciado el curso con todo preparado, tras adoptar un conjunto de medidas, decisiones y actuaciones plasmadas en los protocolos de salud, higiene y prevención de riesgos y también en los documentos de organización pedagógica. Dentro de la mejora continua y adaptándonos a los cambios dados por las distintas administraciones y las demandas de nuestra comunidad escolar, seguiremos revisando y mejorando nuestros protocolos, planes y decisiones para ajustarlas a las nuevas necesidades. Con el concurso y la ayuda de profesorado, alumnado y familias, estamos seguros de poder superar este reto.
En Hipatia, se han creado once grupos nuevos. Hemos habilitado nuevos espacios e incorporado nuevo profesorado para garantizar el desarrollo del proyecto de acuerdo con las medidas previstas en el escenario actual. También hemos ampliado los recursos necesarios para atender de la mejor manera posible a nuestro alumnado y familias, aunque todavía no tenemos muchas certezas del apoyo que recibiremos por parte de la Administración. Agradecemos a las familias y a toda la comunidad escolar su talante, su paciencia y su confianza. Y nos emociona ver que el agradecimiento es mutuo como muestran los carteles que las familias colgaron en las verjas del colegio.
Cada etapa avanzando en sus aprendizajes
El alumnado de cero a tres años fue el primero en dar la señal para que los juegos y las sonrisas volvieran a adueñarse de los espacios, y tras ellos, siguieron el resto de etapas. Ya están de vuelta las miradas y los reencuentros.
El curso ya está en marcha en todos los aspectos: los semilleros y la tierra vuelven a echar raíces en el Aula Viva; el aprendizaje cooperativo se mantiene en todos los cursos, aunque las mesas tengan que estar más separadas y las distintas etapas avanzan en sus trabajos. Así, mientras infantil profundiza en el asombro a través de la luz, en los cursos superiores se han celebrado ya las primeras asambleas de aula, donde el alumnado ha podido expresar cómo se ha sentido estas dos primeras semanas, intercambiando sus miedos, deseos y esperanzas para este curso tan especial.
Muestras de aprendizajes y nuevos proyectos hay decenas, entre ellas, la del alumnado de Biología de 4ºESO que ha comenzado sus prácticas con la desnaturalización de las proteínas de la leche para ver las diferencias que hay entre las proteínas de origen animal y vegetal. En ESO y Bachillerato, se han reinventado los espacios del laboratorio. Con distancia y desinfección del material, las asignaturas de Ciencias siguen siendo experimentales. El alumnado de 1º de Biología y Geología está estudiando los componentes del universo de forma práctica; tanto es así, que han creado sus particulares y diminutas nebulosas en tarros de cristal.
En los cursos de Formación Profesional de Hostelería, la cocina también está a pleno rendimiento: el alumnado practica para mejorar sus destrezas mientras la investigación se aplica a las texturas y los ingredientes, pensando ya en los nuevos postres que endulzarán a los comensales del "Restaurante Escuela Bitácora" de nuevo abierto. Por su parte, los compañeros de Informática han comenzado sus prácticas en el taller, algo más alejados y con mascarilla, pero sin parar.
Las mascarillas nos impiden ver rostros completos, pero la ilusión por el aprendizaje es la misma de todos los años. Así se ha puesto de manifiesto con una actividad en Educación Plástica y Visual sobre la mirada, titulada “Los ojos, más presentes y expresivos que nunca.”
Si queréis ver las fotos que no caben en esta noticia, no os perdáis el día a día en los canales de Facebook e Instagram de Hipatia.